Indemnizar el perjuicio que pueda sufrir una empresa por una interrupción temporal, total o parcial de la actividad propia de su negocio, como consecuencia de un siniestro de daños materiales: este es el principal objetivo de la garantía de pérdida de beneficios.
De todas las garantías que componen una póliza normal de daños materiales, la pérdida de beneficios quizás sea la más desconocida.
Esta garantía ofrece una cobertura que, en caso de siniestro, puede incluso garantizar la continuidad o no de la compañía.
Generalmente, toda empresa tiene como objetivo principal la consecución de un beneficio. No obstante, cualquier siniestro acaecido en ella puede no sólo dañas las instalaciones, sino producir también una paralización parcial o total de la actividad que, sin duda, causará una perdida financiera.
Conceptos básicos de la garantía de pérdida de beneficios:
El perjuicio que pueda sufrir la empresa: Se protege a la empresa contra las pérdidas que se produzcan en su cuenta de resultados, no sobre sus activos. Se trata de una cobertura para garantizar el beneficio de la empresa.
Interrupción temporal: Solamente actúa cuando la interrupción es temporal, esto es, cuando la compañía decide reponer los bienes afectados y seguir con su operativa habitual.
Consecuencia de un siniestro cubierto por alguna de las garantías previstas en la póliza: Para poder activar está garantía, se tiene que haber producido un siniestro de daños materiales.
Para la pérdida de beneficios también se tiene que definir un capital a asegurar.
Existen tres grandes modalidades para definirlas:
Indemnización diaria: La más sencilla para determinar el capital a asegurar. El asegurado marca la cifra que quiere percibir por día laborable que se vea interrumpida la actividad.
Gastos permanentes o fijos: Quedarán cubiertos los gastos fijos que tenga que soportar la empresa durante el periodo que se ve interrumpida su actividad.
Beneficio bruto anual: Es la más completa, pero al mismo tiempo la más compleja de determinar el capital a asegurar que suele coincidir con el ejercicio anual según la contabilidad de la empresa.
El periodo de indemnización establece el limite temporal pactado durante el cual la aseguradora devolver las pérdidas económicas sufridas.
Es importante, por tanto, establecer este periodo de indemnización con suficiente holgura.
Conclusiones: La garantía de pérdida de beneficios ofrece una cobertura muy interesante y tan necesaria como la cobertura de los daños materiales directos, para poder asegurar la continuidad de cualquier empresa ante un siniestro.
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