Se reactiva el Fondo de Reserva de la Seguridad Social para financiar el sistema a través de las aportaciones de una parte la cotización de los trabajadores y autónomos entre 2023 y 2032 por medio del Mecanismo de Equidad Intergeneracional.
El Mecanismo de Equidad Intergeneracional es un sistema para garantizar la financiación de las pensiones, repartido de modo equilibrado entre generaciones.
Se reactiva el Fondo de Reserva de la Seguridad Social para financiar el sistema a través de las aportaciones de una parte la cotización de los trabajadores y autónomos entre 2023 y 2032 por medio del Mecanismo de Equidad Intergeneracional.
Mecanismo de Equidad Intergeneracional, ¿qué es?
El Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) es un sistema que sustituye al Factor de Sostenibilidad aprobado en la reforma de las pensiones de 2013 para garantizar la financiación de las pensiones. A diferencia del Factor de Sostenibilidad, que calculaba las prestaciones en función del aumento de la esperanza de vida, el MEI solo se activará si es necesario y de forma temporal.
El objetivo del nuevo mecanismo es tratar de repartir de un modo equilibrado entre generaciones el esfuerzo de financiar las pensiones. Nuestro sistema es un modelo de reparto intergeneracional, en el que las personas trabajadoras financian de forma solidaria a través de sus cotizaciones las pensiones de los jubilados. Estas se encuentran tensionadas por el envejecimiento de la población, ya que hoy solo hay 2,3 cotizantes por pensionista, cuando hace cuatro décadas la ratio era del 5,3 y dentro de otras tantas apenas habrá uno, según las proyecciones poblacionales del INE. Lo que significa el actual modelo de financiación no es sostenible en el tiempo, más aún con el aumento de la longevidad, la llegada a la jubilación de la generación más numerosa, la del baby boom, y la baja tasa de natalidad.
¿Cómo funciona el Mecanismo de Equidad Intergeneracional?
El acuerdo establece dos componentes:
1- Reactivación del Fondo de Reserva de la Seguridad Social para financiar el sistema a través de las aportaciones de los trabajadores entre 2023 y 2032. Esa aportación para los trabajadores será de un 0,6% de la cotización por contingencias comunes, repartida entre empresa (0,5%) y trabajador (0,1%). En los autónomos será directamente del 0,6% de la cotización.
Esta partida servirá como un colchón en el caso de que ser prevea un desvío del gasto en pensiones para 2050. De ocurrir este escenario, la llamada hucha de las pensiones, que hoy solo cuenta con unos 2.000 millones, se activará en 2033. De no ser necesario utilizar esta “válvula de seguridad”, el acuerdo alcanzando señala que el Fondo se utilizará para reducir cotizaciones sociales o mejorar la cuantía de las pensiones.
2- Si a partir de 2033, los informes de envejecimiento de la Comisión Europea (Ageing Report) revelan una desviación de la previsión de gasto en 2050, se utilizará el citado Fondo, con un límite anual del 0,2% del Producto Interior Bruto (PIB). En caso de que el montante fuera insuficiente, Gobierno y agentes sociales elevarán una propuesta para aumentar los ingresos del sistema al Pacto de Toledo.
Para ampliar esta información consulte con Asesoría laboral.